domingo, 19 de febrero de 2012

Origen de una pasión

Ayer volví a ver una de mis películas de animación preferidas: El Jorobado de Notre Dame.
Me gusta Disney desde que era niña y he disfrutado con cada una de sus historias y confieso saberme muchas de sus canciones.
Pero esta versión en particular, posee una historia muy especial para mí.
En muchas entrevistas para blogs, periódicos o en charlas en diferentes colegios y bibliotecas, me suelen preguntar con frecuencia de dónde nació mi pasión por el Fantasma de la Ópera.
Yo les comento con ilusión que leí la novela de Leroux con 13 años y que me enamoré de su personaje principal, así cómo del misterio que encierra su leyenda.
Pero son pocos los que me han hecho una pregunta que también tiene su respuesta anecdótica y curiosa: ¿de dónde surgió mi amor por la literatura?
Todos los amantes de los libros tenemos un origen, un germen en nuestras vidas que nos lleva a devorar historias, a dedicarnos a la literatura o simplemente a disfrutar con la lectura.
Y en mi caso, ese origen fue el Jorobado de Notre Dame.
Por aquel entonces yo tendría unos 11 años y no me perdía un solo estreno de la factoría Disney.
Meses antes de ir al cine a ver esta película, recuerdo haberles preguntado a mis padres de dónde procedía esta historia. Cuando me dijeron que se basaba en un libro de un autor francés, me dejé llevar por una intensa curiosidad.
En aquellos años, los libros juveniles existentes no me lograban llenar del todo y siempre había sentido un extraño vacío en cuanto a la literatura, difícil de colmar.
Víctor Hugo fue quien me abrió las puertas a este mundo maravilloso y apasionante. En las páginas de su libro encontré lo que tanto tiempo había estado buscando. Quizá fuera su lenguaje, la personalidad de cada personaje, la trágica historia, el trasfondo social e histórico...Pero caí rendida ante aquel libro que sería el prólogo de muchos otros del mismo autor.
Aquel vacío en mi interior comenzó a rebosar de letras, de historias aún por descubrir, de autores por conocer.
Pero estoy segura de que este no es un caso aislado. Que vosotros, amigos, lectores y escritores, tenéis también un comienzo en vuestra andadura literaria.
¿Cuál fue? ¿Una canción? ¿Una película? ¿Un libro en concreto?
¿Queréis compartirlo aquí, conmigo?

jueves, 9 de febrero de 2012

El Violín Negro tercera edición!


Tengo nuevas noticias sobre la tercera edición en rústica de mi novela El Violín Negro!
Saldrá a la venta la primera quincena de Marzo, el  6  o el 13 seguramente.
Estoy muy contenta porque sigue teniendo mucho éxito tanto en España como en México!

Foto inédita

Hola a todos!!

Todos mis lectores de El Violín Negro conocen a Gilles, el cata experto en los subterráneos parisinos que ayuda a la protagonista, Christelle.
Gilles, tal y como comento en mis charlas y firmas, es una persona real y muy amigo mío.
Hoy me ha enviado esta fabulosa fotografía inédita del lago subterráneo de la Ópera Garnier, hogar del Fantasma de la Ópera. En ella puede verse a un buzo: es un bombero de París.
Espero que os guste.:)

domingo, 5 de febrero de 2012

Sociedad Secreta

Hola a todos!

Esta entrada en mi blog está dirigida a todos los lectores de mi novela El Violín Negro y a los amantes de la literatura en general.
En mi novela, y según mis investigaciones, Gastón Leroux, el autor de El Fantasma de la Ópera, pertenecía a una sociedad secreta.
Este hecho es verídico, pero cuando yo escribí el libro, desconocía cuál era el nombre de esta sociedad. Por tanto, la bauticé en mi libro como la Sociedad Hermes, dado que este es el dios griego de los mensajes ocultos y los integrantes de esta masonería hablaban en clave (lo que se denomina el Lenguaje de los Pájaros).
Desde que escribí El Violín Negro he seguido indagando sobre este tema y el tesón finalmente ha dado sus frutos.
Por fin sé el nombre concreto de esta sociedad y sus integrantes más célebres.
Sociedad de la Niebla o también denominada Sociedad Angélica.
Es un nombre misterioso que encierra más de un secreto.
A ella pertenecieron Gastón Leroux y Maurice Leblanc, tal y como yo detallaba en El Violín Negro, pero también se hallaban Alejandro Dumas, George Sand, Gerard de Nerval, incluso Julio Verne.
¿Nunca habéis sentido curiosidad por saber de dónde procede en nombre de Phileas Fogg, el protagonista de La vuelta al mundo en 80 días?
Según parece, esta sociedad de tintes masónicos y rosacrucianos basaba su lenguaje en un libro llamado El sueño de Poliphilo. Este nombre es el equivalente etimológico de Phileas y el apellido Fogg significa niebla en inglés. Curioso, ¿verdad?
Poco a poco me voy acercando con mis averiguaciones a saber la verdad sobre el mito y la leyenda del Fantasma de la Ópera...