Ayer fue un día fantástico en Tudela, donde di una charla sobre el proceso de escritura y los secretos mejor guardados de mi novela Ex Libris a más de 150 chavales de Jesuitas.
Siempre que hablo sobre mis libros a jóvenes lectores es una experiencia maravillosa y muy enriquecedora, ¡y nunca me canso de hacerlo!
Mil gracias a todos ellos por su energía, ganas de aprender y sus aplausos y gracias también a los profesores por su dedicación y por recomendar mi libro (¡e incluso hacerles un examen sobre el mismo!)
Desde luego esas son las mejores recompensas al trabajo de un escritor :)
ResponderEliminar¡Felicidades Sandra!
Un abrazo XXL